Thursday, September 4, 2008

Banco

El banco República de Avenida Brasil y Chucarro estaba repleto de gente cuando entramos con mi abuela. Ella no dudó y se sentó, pasando por delante del expendedor de números, en el despacho de una de las funcionarias que ella ya conocía. “¿Me solucionas este problema?”, le dijo. “Claro que sí”, contestó. Luego de solucionar el tramite, mi abuela se levantó y abandonó el recinto, todo en menos de cinco minutos, ante la mirada de todos en el local. Cuando salíamos se me acercó y dijome, “soy una viva, lo sé”.

1 comment:

eresfea said...

Gerontogracia, creo que está asumida en Uruguay, ¿no?