A pesar de la complejidad de sus convicciones, el planeta Omicron Persei Ocho manejaba un sistema de reglas muy apegado a la razón. Los habitantes odiaban las imperfecciones, el azar, lo improbable. Si bien el planeta tienen las mismas condiciones temporales, químicas y hasta físicas que tiene nuestro planeta tierra, el grado de perfección que tenían los omicronianos obligaba a estar permanentemente buscando encontrar la racionalidad en la cotidianidad.
Un ejemplo claro era la forma que tenían de ver el fútbol. Según una teoría elaborada por ilustres eruditos del planeta, en el fútbol, se habían jugado tantos partidos, se habían marcado tantos goles, que resultaba inútil comentarlos. Se había establecido un sistema minucioso que describía todo los tipos de goles que se habían marcado. Un archivo escrito que documentaba goles pasados que servían como guía para el espectador. Cada vez que se comentaba un partido tanto por tele como por radio, cuando se hacían los goles, los comentarista no describían la jugada y ni se pasaban replay. Lo que se hacía era hacer mención a un gol pasado que fue similar al que se hizo ese mismo partido. El público, tan acostumbrado a esto, ya no necesitaba más información. Ya tenía toda la imagen en la cabeza y no precisaba más detalles por parte del comentarista.
En la actualidad, son varios los que refutan esta teoría, argumentando que lo que fomenta eso es la extinción de los periodistas deportivos puesto que ya no tienen nada que contar… quizá por eso yo estoy pensando en mudarme…
3 comments:
Todo bien, pero nunca hubiera imaginado que tú eligieras una ilustración así para esta entrada...
¿Por?
Debe de ser la pérdida molar, que te está ablandando, me temo. Parece un póster New Age.
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